“…Por lo tanto, el desarrollo farmacológico centrado en las lipoproteínas HDL no debiera enfocarse exclusivamente en la búsqueda de nuevas drogas que aumenten los niveles de colesterol HDL, sino que, además, mejoren las capacidades funcionales de las partículas de HDL. Por ejemplo, el ácido nicotínico no sólo incrementa las cifras de colesterol HDL, sino que también mejora la acción de las partículas de HDL como aceptoras de colesterol durante el eflujo celular de este lípido 11,12 . Por otro lado, nuevos fármacos en desarrollo -como los inhibidores de la proteína de transferencia de ésteres de colesterol (CETP) que elevan los niveles de colesterol HDL-también aumentan la capacidad funcional intrínseca de las partículas de HDL en el proceso de eflujo celular de colesterol 13,14 , aunque todavía no se ha demostrado su real beneficio clínico en la reducción de eventos cardiovasculares.…”