“…La disfunción de la regulación se ha asociado con múltiples trastornos emocionales y del comportamiento, entre los que se encuentran las autolesiones, el trastorno límite de la personalidad y el consumo de sustancias psicoactivas, entre otros (Cerpa & Muñoz, 2005;Garke et al, 2021;Garland et al, 2020;Marín et al, 2012;Parolin et al, 2017;Rodríguez, et al, 2017). Además, la desregulación emocional influye tanto en el desarrollo, como en el mantenimiento y tratamiento del consumo de SPA, y actúa como factor de riesgo para sufrir recaídas (Blanco & Jiménez, 2015;Rezaie et al, 2021;Wegen et al, 2017;Zavala & López, 2012). Blanco y Jiménez (2015) encontraron que puntuaciones bajas en regulación emocional en jóvenes son un factor de riesgo para la ocurrencia de recaídas en los tratamientos de recuperación de consumo de SPA.…”