Honduras celebró el 15 de septiembre 2021 un bicentenario dividido en un contexto pesimista. Por un lado, la pandemia había agravado la pobreza alentando la alternancia presidencial. Por otro lado, las celebraciones fueron supervisadas por el gobierno de Juan Orlando Hernández, acusado de fraude electoral, represión, corrupción y vínculos con el narcotráfico. Aunque existen trabajos sobre los bicentenarios latinoamericanos, pocos tratan el caso catracho. ¿Las conmemoraciones del bicentenario de la independencia en Honduras han generado procesos y relatos más inclusivos? Este texto analiza los eventos, discursos y contenidos del bicentenario de Honduras para entender la exclusión de ciertos actores. El trabajo muestra que se perpetuó una visión patriarcal del Estado-Nación y el bicentenario funcionó como una marca política disputada (el status quo apoyó el relato hegemónico y la oposición apeló al futuro). La conclusión es que el polarizado bicentenario hondureño inviabilizó una revisión integradora del relato nacional.