Este artículo tiene como objetivo reflexionar la contribución pragmática de la tecnología en el ámbito educativo como catalizador del pensamiento crítico. El procedimiento metodológico, de corte cualitativo, fue de tipo exploratorio-descriptivo, el cual permitió la trazabilidad de la información para orientar el estado el arte a un terreno tético y teórico-conceptual. Entre los resultados se evidencia que, en el ecosistema educativo la esfera tecnológica es un catalizador del proceso de enseñanza y aprendizaje que posibilita la transformación socio pedagógica. La tecnología educativa como herramienta sistemática fortifica las prácticas educativas tradicionales e incide a una transformación activa de la escuela. El ecosistema educativo debe brindar una respuesta precisa a las necesidades estudiantiles (nativos digitales), los cuales encuentran motivación en las herramientas digitales. Se concluye que, la tecnología educativa como catalizador del pensamiento crítico en la escuela radica en permitir que los estudiantes aprendan y que alcancen habilidades para el siglo XXI.