“…Además, la información que se obtiene a partir de las medidas del par posibilita evaluar cuantitativamente el estado actual del paciente y, con base en esto, determinar las resistencias adecuadas que se le pueden exigir al sujeto para realizar diferentes tareas motoras dentro del proceso de rehabilitación de lesiones de estructuras como el ligamento cruzado anterior (11,17), meniscos (16), y finalmente, el reentrenamiento de la marcha (21). gularmente datos cuantitativos que le permitan determinar el progreso del paciente durante el proceso de rehabilitación (52,54). La medición del par, utilizando señales de sEMG, le permitiría al fisioterapeuta orientar el plan de intervención del paciente, de acuerdo con las observaciones clínicas, sin embargo, es necesario determinar los tiempos y momentos en los que se utiliza el sEMG para determinar cuantitativamente el estado de los músculos que brindan estabilidad a la articulación, pues, la fatiga muscular tiene un efecto en la reducción de la eficiencia en las contracciones y los movimientos realizados (55), lo cual, podría generar información errónea sobre el progreso en el proceso de rehabilitación.…”