“…En mujeres se encontró que las prácticas sexuales no orgásmicas se asociaron con mayor satisfacción sexual (Holmberg y Blair, 2009). También mayor satisfacción sexual se relacionó con la percepción de mayor intimidad emocional y sentimientos de cercanía (Carvalheira y Costab, 2015;Gamarel et al, 2014;Šević et al, 2016;Totenhagen et al, 2012), menor distanciamiento sexual (Deenen et al, 1994), mayor contingencia en la relación (Sánchez et al, 2011), menor incidencia de celos sexuales (Parsons, Starks, Gamarel y Grov, 2012), cohabitar con la pareja (Biss y Horne, 2005;Smith y Horne, 2008;Tracy y Junginer, 2007) y mayor satisfacción con el tipo de acuerdo sexual dentro de la relación de pareja (Carballo-Diéguez, Remien y Wagner, 2000;Hosking, 2014). Además, una alta satisfacción con la relación de pareja (Henderson et al, 2009;Holmberg et al, 2010;Rosser et al, 1997;Sánchez-Fuentes y Sierra, 2015;Tracy y Junginger, 2007) se asoció de manera positiva con la satisfacción sexual.…”