“…En el caso específico de las pesquerías, la creciente aplicación de investigaciones participativas desde los años 2000 (también conocidas como investigaciones pesqueras cooperativas), y/o de investigaciones con cierto grado de participación local, está vinculada con la prevalencia de relaciones conflictivas entre pescadores, gestores e investigadores, lo cual dificulta el manejo o gestión de los recursos pesqueros (Kaplan & McCay, 2004;Wiber et al, 2004;2009;Conway & Pomeroy, 2006;Hartley & Robertson, 2006;Johnson & van Densen, 2007;Jacobsen et al, 2012). A pesar de su creciente aplicación, las investigaciones participativas en pesquerías, al igual que en otros contextos ambientales, han enfrentado varias dificultades, incluyendo, entre otros, el poco tiempo disponible por parte de los pescadores, su desconfianza sobre el destino final de los resultados de la investigación, y su escaso empoderamiento; menos oportunidades de publicación para los académicos; y la escasa participación de otros actores, como gestores y organizaciones para la conservación (Wiber et al, 2004;Conway & Pomeroy, 2006;Hartley & Robertson, 2006).…”