El emprendimiento en Perú enfrenta altos índices de fracaso, principalmente por la falta de innovación y el insuficiente apoyo de políticas públicas que no generan resultados efectivos. Este estudio analiza cómo la enseñanza del emprendimiento puede promover un cambio pedagógico mediante la implementación de enfoques activos y vivenciales, destacando la importancia de que los docentes complementen la teoría con experiencias prácticas que potencien las habilidades emprendedoras de los estudiantes. Mediante un estudio cualitativo de enfoque fenomenológico, se llevaron a cabo entrevistas semiestructuradas con 14 docentes de una universidad pública peruana. Estos participantes, seleccionados por su disposición a contribuir, formaron parte de un programa formativo, lo que les permitió aportar valiosas perspectivas sobre el tema en cuestión. Los hallazgos destacan la importancia de metodologías colaborativas e interactivas, como el uso de casos reales, que vinculan la teoría con la práctica. La evaluación iterativa refuerza el emprendimiento como un proceso continuo, fomentando la innovación y la adaptabilidad. La implementación de metodologías innovadoras es clave para que los estudiantes desarrollen competencias como resiliencia y pensamiento crítico, preparándolos para los desafíos del mundo emprendedor.