“…Conviene, ahora, tener en cuenta también las evoluciones técnicas que permitieron fomentar ese mercado editorial que comenzaba a desarrollarse. Thomas Bewick, junto con su hermano John, perfeccionó en la segunda mitad del siglo xviii la técnica del grabado en madera, lo que le permitió la creación y reproducción de ilustraciones con gran cantidad de detalles y tonos, aun siendo en blanco y negro; así como la introducción de la línea blanca sobre fondo negro para generar nuevos contrastes(Terrusi, 2012;Thompson, 1996).En 1796, Alois Senfelder inventó la litografía, favoreciendo la reproducción de imágenes a un coste económico más reducido(Terrusi, 2012), además de la impresión en un estilo más pictórico, no tan sencillo y esquemático (Kiefer, 2008). A finales del siglo xviii, el uso del color había marcado ya la obra de algunos artistas y escritores, como el…”