“…En general, el ambiente universitario influye sobre los estudiantes (Arquero y Tejero, 2006) en particular sobre la intención emprendedora desarrollando capacidades como la de asumir riesgo, la predisposición a la acción y la valoración de la propia auto eficacia (Salati et al, 2018), sin embargo, de acuerdo con el trabajo de Soria et al (2016), un curso universitario de emprendimiento puede afectar negativamente la intención emprendedora (IE) de los estudiantes. En principio, porque el emprendimiento puede ser comprendido como parte de una herencia familiar (Klein, 2016) así como derivar de la red familiar y social de padres y parientes que motivan el espíritu emprendedor y son fuentes principales de relación con el mundo de los negocios (Contreras et al, 2017) La intención emprendedora de los estudiantes se observa en la capacidad de asumir riesgos (Dastourian, et al, 2017), sin embargo, las normas subjetivas de presión social juegan un rol inverso aunque de magnitud pequeña sobre la conducta emprendedora (Naia et al, 2017). Por otra parte, la experiencia y formación previa de un emprendedor resulta ser un factor importante en la conducta (Caro-Gon-zález et al, 2016), que en el caso de las universidades colombianas, es más bien teórica y sin la suficiente consideración a la práctica, aunque con esporádicos contactos con empresarios a través de conferencias .…”