Introducción: la tuberculosis es una enfermedad infecciosa que suele afectar a los pulmones y es causada por Mycobacterium tuberculosis. Se transmite de una persona a otra a través de gotículas generadas en el sistema respiratorio de pacientes con enfermedad pulmonar activa. La tuberculosis esofágica es una afección rara (representa solo el 2,8 % de todos los casos de tuberculosis gastrointestinal). Por lo general, ocurre como resultado de la diseminación directa desde los ganglios mediastínicos (rara vez desde los pulmones o el torrente sanguíneo). Su diagnóstico definitivo requiere el aislamiento de los bacilos tuberculosos, lo que rara vez se logra en la práctica clínica; aun así, clínicamente los pacientes presentan síntomas de disfagia, odinofagia y adelgazamiento.
Caso clínico: se presenta un paciente de 40 años de edad con cuadro clínico de 6 meses de evolución con disfagia progresiva exacerbada a disfagia para líquidos, astenia, adinamia, hiporexia, dolor pleurítico, epigastralgia y tos con expectoración blanquecina; se realizó una endoscopia de vías digestivas altas que mostró una mucosa gravemente inflamada con ulceraciones irregulares de hasta 2 cm de profundidad, lesiones que sugirieron tuberculosis esofágica, confirmada por el estudio histopatológico: esofagitis crónica granulomatosa; por tanto, se inició el tratamiento tetraconjugado: rifampicina, isoniazida, pirazinamida y etambutol.
Conclusiones: La tuberculosis con afección del tubo digestivo es una entidad de baja frecuencia; adicionalmente, es importante recordar que la gravedad del cuadro clínico usualmente está relacionada con la coinfección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), y que la asociación de ambas patologías es frecuente.