Los restos de malacofauna que se estudian en este artículo proceden de la villa romana de Pla de Palol, construida a escasos metros de la playa de n’Artigues (Castell-Platja d’Aro, Baix Empordà). La primera fase de este establecimiento se puede remontar a la primera mitad del siglo I a.C. A lo largo de su existencia la villa fue objeto de diversas reformas hasta que a finales del sigloV fue abandonada. En la totalidad de los casos, los restos de moluscos se encontraron entre estratos de nivelación del terreno, derrumbes, abandono o relleno de fosas de naturaleza diversa, todos ellos en posición secundaria en relación a su uso principal y espacio original. De las excavaciones arqueológicas de finales del siglo XX proceden los 901 restos de moluscos que se estudian en este trabajo. Se han encontrado 23 especies diferentes, destacando como especie más abundante la ostra Ostrea edulis y en segundo lugar la lapa Patella ferruginea. Ambas especies eran seguramente objeto de consumo, recolectadas manualmente. Otras especies objeto de consumo serían los gasterópodos murícidos (Hexaplex trunculus y Bolinus brandaris), recolectados con trampas, usando cebos como Phorcus turbinatus, Cerithium vulgatum o Cerastoderma edule (todas ellas presentes en la muestra). Los bivalvos Spondylus gaederopus y Glycymeris bimaculata también tienen una presencia remarcable. En conjunto, el tipo de especies más abundantes estarían asociadas a fondos rocosos, detríticos y arenas de grosor medio, pero no a arenas finas o fangosas, lo que parece indicar que la actividad pesquera de arrastre era nula en este asentamiento. Así, las conchas del resto de especies es más probable que fueran recogidas como restos varados en las playas.