La entomofagia es una práctica evidenciada desde tiempos ancestrales, en continentes como África, Asia y América; se estima que existen unos 2000 tipos de insectos consumidos a nivel global. La relevancia que tienen estas especies radica en que constituyen uno de los grupos animales con más tiempo y abundancia en la tierra, sumada a sus cualidades en la producción de bienestar y la prevención de enfermedades. Muchos grupos de insectos poseen bondades nutricionales: aporte en proteína, fibra y micronutrientes, como hierro, magnesio, fósforo y manganeso; además, tienen vitaminas A, C y D, tiamina, riboflavina y niacina. Este potencial alimento es comparable con la carne y el pescado; sirve como suplemento en casos de desnutrición, por su alto contenido de ácidos grasos y la presencia de aminoácidos esenciales. Por otra parte, los insectos suponen un gasto menor en cría y recolección, con respecto al ganado. El objetivo de la presente investigación es analizar la entomofagia como una opción viable para la seguridad y la soberanía alimentaria, considerando sus beneficios nutricionales, tecnológicos y medioambientales. A través de una revisión sistemática de literatura, se destacan las ventajas de la alimentación con insectos, focalizando el estudio de las especies: orugas (lepidópteros); escarabajos (coleópteros); abejas, avispas y hormigas (himenópteros); saltamontes, langostas y grillos (orthoptera), por su existencia en diferentes zonas de Colombia. Se dará a conocer este modelo alimentario saludable a las personas, impulsando su valor cultural y sostenible.