Abstract
The paradigm shift in doctor-patient communication patterns that has taken place in recent decades has led to more engaging and empowering communicative models that highlight the importance of clinical communication. In this context, informed consent (IC) plays a fundamental role as it helps democratize clinical communication and ensures the patient’s autonomy and right to information. This article examines the communicative process associated with IC by means of a critical analysis of the Spanish legislative framework, both at national and regional level, to determine to what extent current legal provisions regulate the complex communication process involved in giving consent. Based on a corpus of all Spanish legal provisions regulating patient autonomy and the rights and obligations of patients regarding clinical information and documentation, this article analyzes IC as an act of communication on the one hand, and as a document proving the patient's consent on the other. The results indicate that, although they are complementary processes, Spanish legislation devotes more attention to IC as a communicative process than to the document itself, thus failing to address fundamental aspects related to its content and form. It is also observed that the patient's voice tends to be somewhat neglected (consultation of doubts, expression of concerns, etc.). Together with the challenge posed by the need for adequacy and personalization of the information, the legibility and comprehensibility of the IC forms as well as aspects related to its delivery protocol, this casts some doubt on the efficacy of IC as a tool for clinical communication.
Resumen
El cambio de paradigma en los patrones de comunicación médico-paciente que se ha producido en las últimas décadas ha dado paso a un modelo más dialéctico y participativo que no ha hecho sino poner de relieve la importancia de la comunicación clínica durante el proceso asistencial. En este contexto, el consentimiento informado (CI), objeto de estudio del presente trabajo, desempeña un papel fundamental en tanto que elemento democratizador de la comunicación clínica y garante del principio de autonomía y derecho a la información del paciente. El artículo que presentamos profundiza en el acto comunicativo que subyace al otorgamiento del CI mediante un análisis crítico del marco legislativo español, tanto estatal como autonómico, para determinar hasta qué punto las disposiciones legales actuales regulan el acto complejo de comunicación que supone el otorgamiento de consentimiento. Partiendo de un corpus formado por todas aquellas disposiciones legales que regulan la autonomía y los derechos y obligaciones del paciente en materia de información y documentación clínica, el artículo analiza el CI en tanto que acto de comunicación prolongado en el tiempo y documento que materializa el consentimiento del paciente. Los resultados indican que, pese a tratarse de procesos complementarios, la legislación dedica más atención al proceso comunicativo que al producto, pues deja sin regular aspectos fundamentales relacionados con el contenido y la forma del mismo. Se observa, además, que se da poco espacio a la voz del paciente (consulta de dudas, expresión de inquietudes, preocupaciones, etc.) lo que, unido al desafío que supone la adecuación y personalización de la información, la legibilidad y comprensibilidad del documento CI (DCI) e incluso aspectos relacionados con el protocolo de entrega del mismo, arrojan ciertas dudas sobre la eficacia del CI en su vertiente comunicativa.