“…Según Saizar (25) , el creciente acceso a la información impulsa al paciente a permanecer informado acerca del proceso de su enfermedad, diagnóstico y terapéutica, por otro lado, la saturación del servicio de emergencia ha generado atenciones poco personalizadas, carentes de información y comunicación, haciendo sentir al paciente como si no fuera escuchado y que los profesionales de salud no comprenden la experiencia del dolor desde la perspectiva del enfermo. La unión de estas dos razones genera en el paciente cuestionamientos acerca del proceso de atención o terapéutica recibida, produciéndose conflictos o denuncias por desacuerdo con los profesionales de la salud; asimismo, Mack et al (26) refieren que, en cuestiones de salud, el paciente y sus familiares están priorizando dos temas que definen una adecuada atención en salud que son, la relación médico paciente y la comunicación e información que les brinda el médico en relación a su estado de salud. Bajo esa misma perspectiva, los resultados del estudio de investigación realizado, evidenciaron como tercer motivo de reclamación, el desacuerdo del paciente con la atención o terapéutica recibida en la emergencia que desencadena una ruptura en la relación médico paciente y en algunos casos puede llegar hasta denuncias por presunta negligencia médica o mala praxis.…”