“…Diversos artículos de investigación señalan el UMC como seguro y eficaz para muchos pacientes con dolor crónico (Aggarwal et al, 2014;Brunt, Van Genugten, Höner-Snoeken, Van De Velde, & Niesink, 2014;Fitzcharles & Jamal, 2015;Maida & Corban, 2017;Piper et al, 2017;Shah, Craner, & Cunningham, 2017;Webb & Webb, 2014). Se le considera una alternativa para aquellas personas que reciben terapias analgésicas prolongadas con múltiples efectos adversos, como paliativo del dolor en el cáncer avanzado y para las molestias asociadas con la quimioterapia por su efecto antiemético, siendo más seguro que ciertos medicamentos convencionales (Avello, Pastene, Fernández, & Córdova, 2017;Braun et al, 2017;Stinson & De Angelis, 2017;Waissengrin, Urban, Leshem, Garty, & Wolf, 2015).…”