“…En este sentido, son numerosos los autores que señalan que estas variables se relacionan con el ajuste psicosocial (Albanesi, Cicognani y Zani, 2006;Alfaro, Guzmán, Sirlopú, Oyarzún, Reyes, Benavente y de Rota, 2017;Herrero y Gracia, 2004;Hull et al, 2008;Vieno, Nation, Perkins y Santinello, 2007). Asimismo, se ha constatado que la implicación y la participación comunitarias tienen un efecto amortiguador en los adolescentes respecto de los efectos negativos del estrés (Dumont y Provost, 1999;Smith, Faulk y Sizer, 2016) y de la implicación en conductas violentas en la escuela (Jiménez, Musitu, Ramos y Murgui, 2009;Moreno, Povedano y Estévez, 2010). Se ha observado que el hecho de sentirse implicado en la comunidad y de participar en ella potencia la sensación individual de competencia, el autoconcepto, la autoestima, la autoeficacia y el autocontrol, lo que contribuye, a su vez, a un mayor bienestar y ajuste personal y social en los adolescentes (Palomar y Lanzagorta, 2005;Rey, Extremera y Pena, 2011;Smetana, Campione-Barr y Metzger, 2006;Vieno et al, 2007).…”