por estar ahí, acompañándome siempre con una palabra de aliento, un saludo cariñoso y una sonrisa desinteresada. Del mismo modo agradecer a mi familia adoptiva: Mónica, Fernando, Marina, Diana y Carlos por tratarme como uno más de ustedes y siempre darme ánimo. A Andrea por tu amor, compañía, compresión y todos estos años juntos que han sido los mejores de mi vida (junto con los que vendrán).