“…Ahora, para completar el análisis de contenido, y de acuerdo con la segunda dimensión de Fernández 2002 Finalmente, se concibe al islam bajo un prisma occidental, ligándolo a una religión totalitaria. Sin embargo, se debe entender que, como lo demuestra Burgat (2003), no se puede aplicar el concepto de religión a un fenómeno como el islam, que va más allá de religión en una mezcla con las expresiones culturales, políticas, económicas, y en general sociales, de los pueblos en donde se ha instalado. Asimismo, el islam no atravesó un proceso de secularización como sí lo hizo Europa, por lo que aplicar los mismos conceptos históricos y sus implicaciones no es más que imponer una versión de modernidad ajena a la realidad histórica del islam.…”