“…Como se puede advertir, este problema implica inicialmente hacer la distinción entre igualdad, equidad y educación inclusiva, aspectos a tratar en profundidad en el marco conceptual, pero a grandes rasgos, en educación la igualdad implica entenderla desde cuatro facetas: igualdad de acceso, a estar escolarizado; igualdad de supervivencia, o de permanencia en un nivel educativo; igualdad de resultados, entendido como el aprendizaje real de las misma cosas, de aprender lo mismo e igualdad de consecuencias de acceder a un determinado nivel de vida y de trabajo como consecuencia de sus resultados académicos (Farrell, 1999). Cuando la escuela promueve estas cuatro facetas, está favoreciendo la equidad y se materializa al hacer parte de una institución educativa y permanecer en ella.…”