El estudio de la segregación socioespacial ocurrida en las metrópolis contemporáneas evidencia un énfasis tanto en la diferenciación residencial como en las relaciones de clase o raciales ocurridas en los espacios de contigüidad; no se reconoce, sin embargo, una participación activa del espacio en su constitución. A través de un enfoque geográfico, el presente artículo considera la influencia del desarrollo desigual del espacio y la urbanalización constitutiva de los centros urbanos actuales, en los mecanismos de segregación. El análisis del índice de marginación y modelos de autocorrelación espacial global y local con información económica del año 2018 y censal del 2020, expone una invisibilización de la influencia espacial en los mecanismos de estratificación social en el Área Metropolitana de Guadalajara, lo que subraya la necesidad abrir un debate en torno a su concepción como elemento de violencia estructural urbana.