Objetivos: mostrar la eficacia y seguridad de los stents metálicos autoexpandibles para el manejo endoscópico de las fístulas esofágicas.
Materiales y métodos: se evalúo una serie de casos de manera retrospectiva entre el 2007 y el 2017, en los que se manejaron a 11 pacientes con un stent metálico autoexpandible para el manejo de fístula esofágica, en quienes se realizó el diagnóstico por clínica, endoscopia digestiva alta o estudios radiológicos en la unidad de gastroenterología del Hospital Universitario San Ignacio (HUSI) de Bogotá D. C., Colombia.
Resultados: el principal síntoma inicial fue la disnea en 27,3 % de los casos, seguido por tos en un 18,2 %. El hallazgo más frecuentemente encontrado durante el seguimiento fue el derrame pleural en el 36,4 %, se realizó el diagnóstico de fístula en el 45,5 % con esofagograma y el tipo de lesión más reportada fue la fuga en la anastomosis esofagoentérica, con un 45,5 %, seguida de la esofagopleural, con un 36,4 %; y estos pacientes fueron manejados con un stent metálico autoexpandible. En el 100 % hubo éxito técnico y la resolución del defecto se evidenció en el 72,7 % de los casos. La única complicación reportada fue el desplazamiento del stent en el 27,3 %, y en un paciente se requirió el cambio del stent en 3 oportunidades. El promedio de estancia hospitalaria fue de 41,5 días.
Conclusiones: el manejo endoscópico de las fístulas esofagogástricas con stents metálicos autoexpandibles es efectivo y seguro, con una baja tasa de complicaciones.