Research with hundreds of mostly indigenous Maya workers in the export processing plants (maquilas) of highland Guatemala has revealed a disconnect between working conditions in the factories, perceived rights, national and international labor laws, and law enforcement. Because of this disjunction, efforts to address the plight of workers must engage the complex conditions of the current labor regimes. Maquilas operate in contexts that are virtually exempt from regulation and conflate national and global orders, precluding a clear perspective on issues of rights and legal claims. In the new geographies of power, workers in transnational factories fall into the interstices between state and nonstate spaces and lose their rights and entitlements in the process. Investigaciones en torno a cientos de trabajadores, en su mayor parte indígenas mayas, en las maquilas del altiplano guatemalteco revelan profundas discrepancias entre las condiciones laborales en las fábricas, los derechos presuntamente establecidos, una gama de leyes nacionales e internacionales a las cuales se suscribe Guatemala, y los sistemas de tutela y aplicación de la ley. Dadas estas divergencias, cualquier esfuerzo por atender las condiciones de los trabajadores tiene que tomar en cuenta el complejo entorno de los actuales regímenes laborales. Las maquilas operan en contextos prácticamente exentos de regulación y entremezclan el orden nacional y global, impidiendo una visión clara sobre los derechos y reclamos legales. En las nuevas geografías de poder, los trabajadores de las fábricas transnacionales desaparecen en los intersticios entre el espacio estatal y espacios no estatales, dando lugar a una pérdida de derechos y situaciones vagas dentro del marco de la ley.