“…Además de estos factores, la composición de la leche y por consiguiente el punto crioscópico es afectada por la ocurrencia de mastitis subclinica, consumo de agua, estrés calórico, presencia de CO 2 en la leche (Janštová, Dračková, Navrátilová, Hadra, & Vorlová, 2007) el periodo del año, condiciones ambientales, edad y tipo de alimentación del animal, periodo de lactancia, nivel de producción (Dabija, Mironeasa, Orojan, & Sion, 2018) y el ciclo estral de la vaca (Toledo-Alvarado et al 2018). En este trabajo, ambos sitios presentan condiciones climáticas diferentes, lo que propicia condiciones de estrés calórico en los animales Jersey (Conejo, 2017), que afectan el consumo de materia seca por consiguiente el aporte de nutrimentos para la producción de leche, lo cual, se asocia a los nutrimentos presentes en el torrente sanguíneo y los alveolos de la ubre, durante la síntesis de la leche (Strucken, Laurenson, & Brockmann 2015). Argumento que se fortalece, al analizar el contenido de urea en leche presente en las muestras analizadas, donde se determina una diferencia de 2,82mg/dL que favorece a los animales Holstein, valor asociado a una mayor cantidad de proteína degradable en la ración que reciben los animales durante el día y que indica que los animales Jersey, no alcanzan el rango óptimo de 12 a 16mg/dL de urea en leche (Gonzáles & WingChing-Jones, 2016).…”