Para las mujeres latinoamericanas, la inequidad y exclusión en el acceso al mercado laboral ha permitido que el narcotráfico se convierta en un proveedor ilegal, pero legítimo, de empleo. El objetivo del artículo es identificar la incidencia de los roles femeninos en la economía del narcotráfico. La metodología, de enfoque cualitativo y explicativa, toma como instrumento de recolección de datos la etnografía digital para sistematizar cincuenta informes que reportan estas dinámicas laborales en Latinoamérica. Los resultados evidencian que en cinco países, a pesar de mantenerse la instrumentalización como proveedoras de servicios sexuales, los roles femeninos se han reconfigurado con trabajos profesionales y de mayor riesgo en las cadenas logísticas del negocio, aunque esto también implique que estén más expuestas que los hombres en el momento de asumir procesos penales y recibir castigos que simulen la efectividad del sistema judicial. La discusión plantea cómo el narcotráfico ha consolidado un modelo de gobernanza criminal que reproduce brechas de género, en contextos mediados por democracias precarias, permisividad de políticas económicas e institucionales, y fragilidad de sectores estatales y empresariales.