“…(1,2,3) Su metabolismo se da por la ingesta diaria de calcio que es de aproximadamente 1 gr; el 30 % se absorbe en los intestinos; en el proceso de absorción intervienen dos mecanismos; uno es mediante difusión pasiva o transcelular mediada por vitamina D y el otro es mediante transporte activo o paracelular. (4,5,6) El calcio participa en muchas funciones fisiológicas, incluidas la señalización intercelular, el potencial de membrana, la conducción nerviosa y la coagulación sanguínea; (7,8,9,10) es el segundo mensajero intracelular multifuncional involucrado en mecanismos celulares complejos que incluyen diferenciación, contracción, mitosis y muerte celular; el mantenimiento de la concentración de calcio extracelular dentro de los límites normales está influenciado principalmente por la hormona paratiroidea (PTH) y la vitamina D, seguidas por la influencia de la calcitonina, de esta manera la homeostasis del calcio está estrechamente relacionada con la homeostasis del fosfato y el magnesio. (11,12,13) El hipoparatiroidismo posoperatorio es difícil de definir, porque existen varios criterios y parámetros, que incluyen: criterios clínicos, sintomáticos y asintomáticos; parámetros bioquímicos, niveles séricos de calcio y PTH bajos; (3,4,5,6) la hipocalcemia transitoria por hipoparatiroidismo es la complicación más común de la cirugía cervical de tiroides o paratiroides; la secreción insuficiente de hormona paratiroidea (PTH) origina la hipocalcemia postoperatoria por una inhibición de la reabsorción ósea, que reducirá la síntesis de 1-25-dihidroxicolecalciferol (vitamina D) por el riñón y reducirá la absorción intestinal de calcio, lo que provocará hipocalcemia posoperatoria.…”