a lepra es una de las enfermedades del hombre que ha sido reconocida por antiguas culturas L desde el año 1 400 a.C. Esta revisión engloba el conocimiento actual de factores intrínsecos que influyen en la resistencia a la infección por Mycobacterium leprae, en la regulación de la variedad de manifestaciones clí-nicas y patológicas y en la respuesta inmune dentro del amplio espectro de la enfermedad, desde el polo tuberculoide (paucibacilar), hasta el lepromatoso (multibacilar). Se discuten la especificidad, la sensibilidad y la utilidad de los métodos disponibles de diagnós-tico para la identificación y la clasificación de los bacilos ácido-alcohol resistentes; la detección de antígenos específicos en la piel, en las mucosas de la nasofaringe, en la orina y el suero, así como en la medición de anticuerpos específicos y la respuesta intradérmica a extractos de bacilos. Hasta el momento, la única medida efectiva de control que ha disminuido sustancialmente el número de casos registrados es la poliquimioterapia (PQT). Se concluye que la eliminación de la lepra en el continente americano es factible de alcanzar para el año 2000 en la mayoría de los países, siempre que los sistemas nacionales de salud mantengan el compromiso de identificar, registrar y tratar todos los casos diagnosticados. Se proponen estrategias en relación con los esquemas efectivos de tratamiento, la evaluación de los programas de PQT, las actividades de coordinación y armonización con otros programas de salud pública y el desarrollo de investigación operacional.La lepra es una enfermedad infecciosa crónica producida por M. leprae. 1 Esencialmente es una enfermedad de los nervios periféricos, pero también afecta la piel y otros órganos (mucosas, ojos, testículos, tracto respiratorio alto, músculos y huesos). En la práctica sanitarista los casos de lepra se definen como: personas que tienen signos clínicos de lepra, con o sin confirmación bacteriológica o serológica del diagnóstico, y todas ellas necesitan tratamiento. Son considerados como signos clínicos cardinales de lepra los siguientes: a) lesión cutánea única o múltiple (hipopigmentada o eritematosa), no típica de alguna otra enfermedad cutánea; b) pérdida de sensibilidad (térmica, dolorosa y/o del tacto) con o sin lesión cutánea, y c) troncos nerviosos o nervios cutáneos engrosados. Son considerados equivalentes de los signos cardinales: a) la presencia de bacilos ácido-alcohol resistentes en frotis o biopsias de piel, y b) la evidencia histopatológica definida de lepra, confirmada por un dermatólogo con experiencia en la enfermedad.Se consideran como sospechosos de lepra los casos donde se encuentra apenas uno de los signos cardinales (o equivalente) de los anteriormente mencionados. Se definen como lepra incipiente cuando están presentes dos signos cardinales (o equivalentes), representados por un número limitado de lesiones, en ausencia de discapacidades. El de lepra avanzada se define cuando las lesiones son extensas y/o hay discapacidades. Para comprender mejor las bases, la disponibil...