“…Tal y como se he comentado, la escolaridad y ocupación laboral son dos de los factores de la RC que más implicación tienen en los trastornos neurocognitivos (Farfel et al, 2013;Lojo-Seoane et al, 2012;van Loenhoud et al, 2019), donde los estudios muestran que poseer un bajo nivel de vocabulario, escolaridad y complejidad laboral es un importante factor de riesgo para el desarrollo de trastornos neurocognitivos y depresivos (Cuart Sintes, 2017;Farfel et al, 2013;Lojo-Seoana et al, 2012;van Loenhoud et al, 2019). Aunque los estudios no muestran evidencias significativas sobre la influencia de estos factores con el padecimiento de las demencias (Capogna et al, 2019;Yasuno et al, 2020), sí pone de manifiesto en relación con estos factores, que aquellas personas con una baja RC son las que peor rendimiento cognitivo mostraron en las evaluaciones (Busatto et al, 2020;Contador et al, 2017;Darwish et al, 2018;Haussmann et al, 2020;Sobral et al, 2015). Concretamente, las personas con una menor escolaridad son aquellas que tienen una mayor probabilidad de padecer un trastorno neurocognitivo en el futuro (Busatto et al, 2020;Contador et al, 2017).…”