Mi andadura en la medicina y en el difícil camino de la investigación se remonta a la década de los noventa. Siempre tuve mucho interés en realizar dicho trabajo y pude tener la oportunidad gracias a mis dos magníficos directores de tesis.El Doctor Don José H. Amón Sesmero que me propuso el camino a seguir en el mundo de la urología desconocido por mí y, su aliento continúo para que no desfalleciera en el mismo y; el Doctor Don Manuel González Sagrado que ha estado apoyando con su continuo e incansable quehacer en la estadística. La amistad, confianza y disponibilidad de ambos tutores en todo momento ha sido vital para llevar a buen puerto esta tesis doctoral.A Doña Rosa Conde Vicente por las aportaciones esenciales y orientaciones siempre tan útiles.Por último, a mi familia y muy especialmente a José y Diego, por ceder parte del tiempo, por darme aliento para atenuar las adversidades y apoyarme para superarme cada día."L'essentiel est invisible pour les yeux. C'est le temps que tu as perdu pour ta rose que fait ta rose si importante. Les hommes ont oublié cette verité. Mais tune dois pas l'oublier. Tu deviens responsable pour toujours de ce que tu as apprivoisé. Tu es responsable de ta ro-se…"