Introducción: La dieta mediterránea (DMed) reduce la morbimortalidad. El confinamiento ocurrido en España entre los meses de marzo y mayo de 2020 podría generar cambios conductuales, entre ellos la adherencia a la DMed. El objetivo del presente estudio ha sido valorar la citada adherencia al concluir dicho confinamiento y compararla con la situación previa al mismo.
Métodos: Los datos se obtuvieron mediante dos cuestionarios en línea uno al comienzo del confinamiento y otro al final, en personas adultas procedentes de población española, las cuales respondieron de forma anónima y voluntaria. La valoración de la adherencia a la DMed se realizó a través de dos cuestionarios: Mediterranean Diet Adherence Screener (MEDAS) y PREDIMED modificado, los cuales contenían 14 cuestiones cada uno. Otras variables incluidas fueron: edad, género, índice de masa corporal (IMC), Comunidad Autónoma de procedencia, tipo de convivencia en domicilio y nivel de estudios alcanzado. Al concluir el confinamiento la comparación entre los cambios se realizó con el estadístico t de Student y la prueba de McNemar.
Resultados: Participaron 207 personas (137 mujeres), edad media de 51,3±12,4 años, intervalo de edad: 20-83 años. Transcurrido el confinamiento el IMC permaneció sin cambios (24,55±3,7 kg/m2 inicial y 24,57±3,7 kg/m2 final, p=0,752), y sí el consumo de pescado (51,2% inicial y 60,9% al final, p=0,003) a expensas fundamentalmente de las mujeres y la adherencia a la DMed, aumentando la puntuación total por término medio tanto en MEDAS (10,6±2,0) al inicio y 10,57±2,0 al final; p=0,001) como en PREDIMED modificado (9,47±2,1 al inicio y 9,93±2,1 al final, p<0,001). Igualmente, la proporción de los participantes que tenían una puntuación clasificada como alta al principio, aumentó al final del confinamiento: de 80,7% inicial en MEDAS a 87,9% al final, p=0,021 y de 68,6% inicial en PREDIMED modificado a 75,8% al final, p=0,037.
Conclusiones: En la muestra de nuestro estudio, durante el confinamiento no se apreciaron cambios en el IMC, y sí aumentos en el consumo de pescado y en la adherencia a la DMed.