Este artículo se centra en el análisis de las principales líneas de actuación seguidas por las organizaciones obreras y empresariales en el proceso de Transición política a la democracia en España. Los agentes sociales adecuaron sus estrategias para consolidar su posición en el nuevo marco de las Relaciones Laborales. Así, mientras en el ámbito empresarial se logra la concentración bajo unas siglas, en el sindical, prima la libertad sobre la unidad, traduciéndose en la fragmentación de la representación de los trabajadores, y la defensa de un modelo basado en la concertación social, construido durante el marco de la Transición, que primó la estabilidad del proceso, se tradujo en una serie de mejoras en las condiciones de vida laborales, y, con sus luces y sombras, es reconocido como una vía de negociación para crisis más actuales donde se subraya el relevante papel de los agentes sociales. El texto contempla a estos protagonistas del acuerdo social desde una perspectiva integradora, enfoque menos presente en la historiografía, a través de una miríada de fuentes complementarias, fundamentadas en estudios relevantes sobre la materia, testimonios y memorias de quienes vivieron estos sucesos, así como el eco de los acontecimientos en prensa y revistas de organizaciones empresariales.