En este artículo se pretende exponer el papel que desempeñan los medios, tanto impresos como electrónicos, en los procesos de normativización lingüística. Lenguas pluricéntricas como el español, el alemán, el francés o el portugués, que se caracterizan por la fuerte incidencia de conflictos normativos, constituyen un terreno particularmente fértil para indagar sobre la manera en que actúan los medios y los sectores donde tienen un papel destacado respecto a las normas lingüísticas. Se abordarán los siguientes aspectos, poniendo especial hincapié en los tres últimos y echando mano de ejemplos de los idiomas arriba mencionados: 1. Los medios como «tribuna» del discurso normativo, 2. los medios como generadores de nuevas demandas normativas, 4. los medios como aceleradores del intercambio entre variedades de una misma lengua y 3. los medios como actores sociales que consolidan nuevas normas, divergentes de las tradicionales.