Este artículo explora el uso de la inteligencia artificial en la vigilancia y preservación del agua, el aire y el suelo. El análisis examinó estudios revisador por pares publicados entre 2020 y 2024, con un enfoque específico en la contribución de la inteligencia artificial a la mejora de las técnicas de gestión ambiental. El procedimiento de selección se limitó a treinta y tres investigaciones pertinentes, que se clasificaron en tres dominios principales, calidad y gestión del suelo, contaminación del aire y monitoreo ambiental, y aplicaciones de IA. Las técnicas de inteligencia artificial, incluido el aprendizaje automático y el aprendizaje profundo, muestran un gran potencial para mejorar la precisión de las predicciones y optimizar la asignación de recursos en varios campos ambientales. Los usos principales de esta tecnología son evaluar la calidad del suelo, predecir los niveles de contaminación del aire y gestionar los recursos hídricos. La integración de la IA con los métodos de monitoreo convencionales mejora la precisión y la eficacia de la gestión ambiental. Sin embargo, existen dificultades continuas para garantizar la precisión y confiabilidad de los datos, la capacidad de los modelos para aplicarse a diferentes escenarios y la integración exitosa de estos modelos en diversas situaciones. La inteligencia artificial ha demostrado su capacidad para generar cambios significativos en los campos de la vigilancia y la conservación del medio ambiente. Las investigaciones posteriores deberían dar prioridad a la ampliación de los conjuntos de datos, la incorporación de la IA a las tecnologías en desarrollo y la resolución de las consecuencias socioeconómicas, a fin de aprovechar al máximo el potencial de la IA para abordar cuestiones ambientales complejas.