“…En primer lugar, esta modalidad se inserta en una lógica multidisciplinar que dificulta la construcción de un cuerpo teórico consistente. En segundo, si bien el estudio sobre la naturaleza, caracterización y propósito de la CSS ha sido abordado en diversos estudios de casos (Santander, 2016;Sidiropoulos et al, 2015;Garelli, Huitrón y Besharati, 2016;Prado, 2018;otros), aún es poca la literatura que analiza la práctica efectiva de esa política (Besharati y Rawhani, 2016;Garelli, Huitrón y Besharati, 2016;Kern y Weisstaub, 2018;Garelli, 2018;Huitrón, 2020;otros). Y, en tercer lugar, la reducida experiencia acumulada y el carácter incipiente de su arquitectura institucional hace que en la actualidad resulte difícil contar con un estándar global de medición y evaluación de la CSS, así como disponer de datos robustos que permitan alcanzar un juicio valorativo, basado en evidencias, respecto al diseño, puesta en práctica y efectos (resultados e impactos) de la CSS en el desarrollo de los países que la practican.…”