“…El riesgo de fraude académico constituye la posibilidad de incurrir en situaciones deshonestas que afectan los objetivos institucionales y sociales de formación e integridad de los estudiantes. En el contexto universitario, el fraude se ha tipificado como un comportamiento ilícito respecto a exámenes y trabajos para obtener una calificación que les permita a los estudiantes aprobar los cursos (Bunn et al, 1992;Ceballos y Vásquez, 2008;Hughes y McCabe, 2006;Medina y Verdejo-Carrión, 2016;Mejía y Ordóñez, 2004). En este sentido, McCabe et al, 2006; detallan una serie de acciones de fraude académico: copiarse en un examen, consultar notas o textos prohibidos durante un examen, ayudarle a otra persona a copiarse, conocer de antemano las preguntas de un examen a través de alguien que lo haya presentado previamente y el plagio asociado con la presentación de trabajos escritos.…”