Las amenazas para los estados han evolucionado en el tiempo, en ocasiones a causa del devenir histórico y en otras siendo estas el propio motor de cambio. Hoy en día son muchos los riesgos que acechan a nuestras sociedades y que ponen en jaque nuestro estado de bienestar y la convivencia democrática y con ello también han variado los propios conceptos de seguridad, su forma de estudio y sobre todo la herramienta de la que tradicionalmente se han servido los estados para analizar, prevenir y responder a estos, como es la inteligencia. Por ello, a raíz del interés por las políticas de seguridad y de la constante evolución de las amenazas para nuestros sistemas democráticos, a través de este artículo realizaremos una aproximación teórica a dos marcos epistemológicos, distintos y fruto del devenir histórico, sobre la forma de observar, analizar y responder ante las amenazas de la seguridad. Así, observando cómo se han estudiado tradicionalmente estas, su evolución, el tipo de respuesta que han obtenido, y las aportaciones de distintos autores, podremos delimitar teóricamente la existencia de dos paradigmas de inteligencia para la seguridad en los que la manera de analizar y responder es completamente distinta. Con esto, se pretende, no solo articular una perspectiva de seguridad y de defensa de interés sino contraponer los paradigmas de seguridad y defensa tradicionales a las nuevas corrientes, fruto del contexto actual, con el fin de hacer políticas públicas más eficaces y respetuosas con los Derechos Humanos.