“…Esto permite identificar las estrategias para afrontar las situaciones conflictivas dentro y fuera del núcleo familiar, resaltando si se identifican tipos de violencia o estrategias de diálogos, nuevas formas o pautas de crianza o el reforzamiento de las tradicionales, todo en vía de proponer los hallazgos como posibilidades de indagación y reflexión alrededor de nuevas formas de gestionar los conflictos y corresponder a la nueva realidad que afrontan y son constructores (Valencia, 2016), pues las consecuencias del conflicto armado no son homogéneas, en tanto la guerra fractura las formas tradicionales de vínculos y relaciones, además, implica nuevas relaciones de poder (Cifuentes, 2009). Por lo tanto, la familia es una institución social entendida como un puente entre el individuo y la sociedad, comprendiendo y relacionándose entre subsistemas (Meléndez, Paternina & Velásquez, 2018).…”