Roma ciudad abierta no solo es considerada una película que retrata la resistencia italiana y que promueve la propaganda antifascista, sino que, además, representa un ejemplo del estilo rosselliniano, de su forma de captar la realidad en su crudeza. Una realidad marcada por hombres y mujeres que sufren, que luchan contra las adversidades y que anhelan un futuro diferente. Sin caer en el pesimismo ni en la desilusión, Rossellini presenta la tragedia que Italia estaba viviendo en los años finales de la Segunda Guerra Mundial. El objetivo de la presente investigación es reflexionar sobre la importancia de la película, destacando cómo, a través de una obra atemporal, el cineasta crea una obra maestra para que los trágicos acontecimientos de la época no caigan en el olvido. Tras un atento analisis de la película, se pondrá el acento en la forma de representar el miedo y la muerte que impregnaban la sociedad romana, entre realismo y simbolismo. La película creó escuela, siendo pionera en la idea de fomentar una conciencia crítica sobre acontecimientos histórico-sociales cercanos en el tiempo.