La Inteligencia Artificial ha generado cambios muy grandes en la sociedad del siglo XXI, por ello este tipo de tecnología ha desarrollado como ventaja para el docente múltiples aplicaciones y herramientas que pueden ser manejadas por ellos para hacer que la enseñanza sea más personalizada, realizar evaluaciones del rendimiento de los alumnos, otorgar contenido educativo, diseñar experiencias de aprendizaje y hacer retroalimentación de manera automática. El objetivo general del presente artículo es analizar la inteligencia artificial como un recurso primordial para el docente del siglo XXI, asimismo, el tipo de estudio utilizado fue descriptivo y como lineamiento se realizó la búsqueda de artículos, trabajos de grado y revistas científicas. Como resultado se obtuvo que los múltiples beneficios de la inteligencia artificial le permiten al docente tener más tiempo para realizar actividades pedagógicas de mayor relevancia con el propósito de que el alumno pueda tener una mayor retroalimentación. Por lo tanto, este tipo de tecnología es vista como una valiosa herramienta para contribuir en estos procesos, sin embargo, se debe tener en cuenta que la IA por ningún motivo debe sustituir la intervención humana en la educación, sino que más bien debe ser complementada de manera potencial.