En 2014 Chile se comprometió a propender hacia ciudades sostenibles por medio de una Política Nacional de Desarrollo Urbano alineada con los Objetivos del Desarrollo Sustentable (ODS). Recorridos cuarenta años de políticas de viviendas sociales subsidiadas, aplicar un desarrollo urbano sostenible resulta un desafío en ciudades con considerables índices de desigualdad socioespacial. Esta investigación pretende analizar las ciudades costeras, enfocándose en Arica y Coquimbo-La Serena que, por su localización, han tendido a tener transformaciones significativas en el transcurso de los últimos veinte años. Se han utilizado datos de servicios sanitarios, calidad de la vivienda, hacinamiento y estándares de desarrollo urbano. Los resultados constatan que el agua se ha convertido en un tema importante en un contexto de sequía del norte de Chile. Las viviendas sociales subsidiadas, además de encontrarse en vulnerabilidad en la provisión de agua, tienen una calidad estructural cuestionable frente a eventos climáticos importantes, así como también a condiciones de hacinamiento que las vuelven más críticas en lo referido a la sostenibilidad. Se concluye que la aplicación de la sustentabilidad en las políticas urbanas del siglo XXI puede resultar un discurso armonioso, pero la realidad de las comunas costeras dista mucho de alcanzar esta condición.