“…El análisis y seguimiento de la edificación fuera de los ámbitos urbanos plantea enormes dificultades dadas las particulares características que este fenómeno presenta. Entre estas particularidades hay que referirse a su dispersión sobre el territorio, a unos altos niveles de irregularidad jurídica, a una usual falta de planificación y control por parte de las administraciones y, en los últimos tiempos, a unos ritmos acelerados de crecimiento de la mano de diferentes fenómenos como la expansión de la segunda residencia, el urbanismo difuso y otros tipos de pautas socio-demográficas que, en definitiva, están suponiendo una creciente ocupación de los espacios rurales y naturales (Yus y Torres, 2010;Prados, 2012;Santos y García, 2012).…”