A Carmen Badía, que se habría ido conmigo al fin del mundo (y habría traído a muchos más)
AgradecimientosEste trabajo se ha realizado con financiación de la Universidad Complutense de Madrid, mediante una beca-contrato para personal investigador en formación, y de la Fundación Biodiversidad a través del proyecto 'Caracterización ecológica y agronómica de la interacción bosque-pradera, para la elaboración de un modelo sostenible de explotación silvopastoral en la región de Aysén (Chile)'. Este proyecto fue fruto de la colaboración de los investigadores José Manuel de Miguel, Miguel Ángel Casado y Belén Acosta en España, y Alejandro del Pozo y Carlos Ovalle en Chile.Ellos me invitaron a participar en el mismo. Su visión experimentada de los sistemas silvopastorales mediterráneos encontró un nuevo desafío en la Patagonia. Este enfoque sorprendió a los expertos agrónomos y forestales locales, y me proporcionó el entusiasmo para realizar esta tesis.Aquella invitación y este entusiasmo fueron sólo el principio. Durante el proceso he aprendido de todos y cada uno de los 'ecólogos con fronteras', les estoy enormemente agradecida por la oportunidad brindada y por su apoyo y dedicación. En especial, a mis directores José Manuel de Miguel y Alejandro del Pozo, que han compartido conmigo su conocimiento y su experiencia. Las discusiones han sido interesantes siempre, y los encuentros y desencuentros han resultado fundamentales para la consecución de los objetivos propuestos en este trabajo.En Chile, los agrónomos Christian Hepp Kuschel y Hernán Felipe Elizalde del centro regional de investigación del Instituto de Investigaciones Agropecuarias en Chile (INIA) Tamel Aike también participaron en el proyecto. Ellos me proporcionaron el espacio en el laboratorio, la movilización diaria al centro desde Coyhaique y, desde allí, a la punta del cerro, así como el apoyo logístico y académico necesario para la ejecución de los muestreos y demás tareas de campo. Les estoy muy agradecida por su amable acogida y por hacerme partícipe de la cotidianidad de Tamel Aike.Respecto al apoyo logístico, la participación de Nicolás Romero Sandoval en los muestreos del primer año fue crucial. Su pericia facilitó el establecimiento de las parcelas, los muestreos de suelo, la instalación y supervisión del experimento (fallido) para evaluar el banco de semillas, los muestreos de biomasa de todo el año, la rotación de los animales, y permitió superar con éxito las adversidades del trabajo de campo, siempre con buen humor y sobre todo con un profundo respeto por las condiciones impuestas por la naturaleza, que son difíciles de ignorar en la Patagonia. Sin camioneta, en moto o en caballo, o andando. No me olvido de las mil horas separando la biomasa, de la abuelita, el perejil, el puma. Lo que aprendí con Nicolás no es parte explícita de esta memoria pero está detrás de cada dato y me ha permitido funcionar en lo sucesivo, y empezar a comprender la realidad de esta región remota.El resto del personal de Tamel Aike también me acompañó y me apoyó en lo pos...