“…PdC ha sido objeto de reflexión por parte de los propios funcionarios que estuvieron involucrados en su surgimiento e implementación, tanto en Brasil (Turino, 2013;Santini, 2017) como en Argentina (Benhabib, 2018;FuentesFirmani, s/f;Lucesole, 2016). Otras investigaciones lo han abordado como objeto de análisis (Mihal, 2014;Lacarrieu & Cerdeira, 2016;Rodrigues de Melo, 2016;Brizuela & Barrios, 2017;Wortman, 2017;Mello, 2018Mello, , 2019 o estudiaron su implementación e impacto en Brasil (Barbosa & Calabre, 2011;Vilutis, 2009;Bentes, 2016;Rachild, 2016) y en Argentina (Prato & Segura, 2018;Fernández, 2020;Sánchez Salinas, 2020;Wajnerman, 2018;Borda-Chauvin, 2020), por mencionar sólo algunos. Benhabib (2018) postula tres puntos importantes que constituyen la política de PdC: la transmisión directa de fondos hacia las instituciones a través de las distintas líneas de aplicabilidad del programa, el fortalecimiento de una Red Nacional de PdC -a partir del armado de una Comisión Nacional de PdC y un Consejo Cultural Comunitario 5 que permita construir una co-gestión participativa-y la formación e intercambio de experiencias.…”