El estudio de los gases volcánicos abarca diferentes procesos que van desde escalas regionales a globales, y que acontecen en una larga escala de tiempo. Las emisiones de gases volcánicos contribuyeron a la creación de la primera atmósfera primordial y actualmente contribuyen a la regulación de los procesos superficiales, como el clima, los procesos biogeoquímicos y la química de aguas superficiales. En la historia de la Tierra, grandes emisiones de gases perturbaron el equilibrio climático y fueron responsables de extinciones masivas. Erupciones catastróficas también emitieron grandes cantidades de gases reactivos, perturbando la química atmosférica generando efectos climáticos importantes e inmediatos. El monitoreo de las emisiones volcánicas constituye un campo muy activo en la investigación de los gases y su interacción con la atmósfera.