“…Siguiendo a Visentini (2013), la presidenta se inclinó a apoyarse en la estructura burocrática de Itamaraty, manifestándose en una diplomacia reticente a los riesgos, con poca osadía e innovación (Saraiva;Gomes, 2016, p. 84). El perfil técnico y pragmático de Dilma, sumado a la falta de experiencia en asuntos internacionales junto con el desinterés ante los mismos frente a las cuestiones domésticas (Cornetet, 2014;Reis da Silva;Pérez, 2019;Malamud, 2017;Visentini, 2013) fueron algunos factores que determinaron la retracción de la misma.…”