Introducción. La duplicación esofágica es una malformación congénita que ocurre por un error embriogénico entre la tercera y sexta semana gestacional. Se encuentran tres variantes morfológicas, quística, tubular y diverticular, y estas tienen como características en común el poseer una capa muscular desarrollada, un revestimiento epitelial del tracto digestivo y estar adheridos al esófago. El objetivo de este artículo fue presentar un caso clínico con su tratamiento endoscópico exitoso.
Caso clínico. Se presenta el caso clínico de una paciente de 27 años, con dolor retroesternal, sensación de pirosis y nauseas, en quien se le diagnosticó una duplicación esofágica, que fue tratada por vía endoscópica.
Resultados. Se realizó manejo endoscópico, donde se practicó una sección del tabique con tijera, involucrando la mucosa, submucosa y fibras musculares. La paciente tuvo adecuada evolución y resolución de los síntomas.
Conclusiones. La duplicación esofágica es una enfermedad infrecuente, que debe ser tenida en cuenta en el diagnóstico diferencial de divertículos esofágicos y lesiones subepiteliales del esófago. Las nuevas herramientas endoscópicas para el manejo de diferentes patologías permiten realizar procedimientos con múltiples ventajas sobre la cirugía abierta o mínimamente invasiva.