El disrafismo espinal oculto incluye alteraciones en la fusión del tubo neural, en el que la lesión está cubierta por la epidermis, su incidencia estimada es de 0,5 a 5 casos por cada 1000 nacidos vivos. Los estigmas cutáneos pueden ser el único signo de la patología, los cuales pueden no ser muy evidentes. Reporte de caso de mujer de 36 años que acudió a consulta por cuadro de dolor lumbar de inicio insidioso, de 3 semanas de duración, que con el paso de los días se fue intensificando, irradia a miembros inferiores, cede parcialmente con analgésicos comunes y se acompaña de parestesias en ambos miembros. Se solicitó TAC y RMN que reveló anomalía anatómica sacrococcígea caracterizada por abertura de canal raquídeo, ausencia de cóccix, situación baja del cono medular, siringomielia e hiperintensidad a nivel del filum terminal sugestivo de lipoma. Se confirmó el diagnóstico de espina bífida oculta a nivel sacro, con lipoma del filum terminal, médula anclada con situación baja del cono medular y siringomielia asociada. Actualmente es controversial el beneficio cirugía profiláctica en pacientes asintomáticos, siendo preferible una conducta conservadora con estrecho seguimiento urológico y neurológico, entre las medidas de prevención se recomienda evitar el ejercicio físico extenuante, disminuir carga de columna lumbar y reeducación postural.