“…Estos casos son etiológicamente diferentes, ya que se trata de meras alternancias en el régimen preposicional, un fenómeno constante y frecuente a lo largo de la historia de la lengua y en el que se han visto implicadas muchas preposiciones, además de de. Por ello, en muchas investigaciones se considera la variación solo para la alternancia {de/Ø}+que y el fenómeno, al que consecuentemente se le denomina (de)queísmo, se analiza tomando en cuenta de manera conjunta los casos de presencia de preposición frente a los de ausencia (véase, p. e., García 1986, Boretti de Macchia 1989, Rabanales 2005, Guirado 2006, Almeida 2009a. Esta posición teórica y metodológica, sin embargo, no es asumida de manera unánime y algunos autores consideran preferible seguir tratando los fenómenos de manera diferenciada, para lo que se esgrimen causas externas y causas internas: aparte de la distinta consideración social hacia ambos fenómenos, el queísmo se produce en todas las épocas de la lengua y aparece en diversos tipos de construcciones sintácticas, mientras que el dequeísmo es un fenómeno más moderno, que se circunscribe a las completivas de algunos verbos y afecta únicamente a la preposición de (Blas Arroyo y Velando Casanova 2022: 3).…”