En el ámbito arqueológico, una de las ultimas fronteras de conocimiento se ha situado en el entendimiento de la mente antigua a través de sus restos materiales. En las últimas décadas, aprovechando las innovaciones técnicas y epistemológicas, se ha abierto un nuevo abanico de posibilidades para este tipo de estudios. La llamada arqueología cognitiva nace para resolver el problema paradigmático entre naturaleza y cultura y para intentar estudiar los procesos cognitivos de las sociedades pasadas en la creación y desarrollo cultural que se dio en ellas. El presente estudio pretende poner en valor dicha especialidad arqueológica, haciendo un repaso de su historiografía y poniendo de relevancia uno de los campos de estudio de esta especialidad que es la llamada cognición 4E. Por último, proponemos la inclusión del paisaje como un elemento fundamental de estudio dentro de esta especialidad, por su influencia y rol en el desarrollo cultural, como han demostrado estudios muy recientes. Una aproximación donde las barreras entre ciencias exactas y sociales debe romperse para obtener un mejor entendimiento de la cultura como totalidad.