INTRODUCCIÓNEl embarazo se caracteriza por cambios fi siológicos que ocurren y son esenciales para promover y proteger el desarrollo del feto y también para preparar a la madre para el parto (1). Lo anterior determina un aumento de las necesidades nutricionales de macro y micronutrientes en relación al período pre-concepcional (2, 3). El crecimiento y desarrollo del feto dependen directamente de la alimentación de la madre, siendo el calcio, hierro, zinc, ácido fólico y los ácidos grasos (AG) esenciales nutrientes críticos en esta etapa (3). Entre estos últimos, el ácido linoleico (C18:2 ω-6, AL) y el ácido a-linolénico (C18:3